ESTEMOS ALEGRES … ¡CRISTO HA RESUCITADO!

Monseñor Guillermo Elías celebra la Santa Misa de la Aurora en Catacaos

20 de abril de 2025 (Oficina de Prensa).- Nuestro Administrador Apostólico Mons. Guillermo Elías Millares celebró a las 04:00 am., la Misa de la Aurora, en el Domingo de Pascua de Resurrección en la Parroquia “San Juan Bautista” de Catacaos, la misma que fue concelebrada por el R.P. Clever Santur Rivera, Párroco del lugar, y los Padres Juan Carlos Pacherres Carmen y Juan Manuel Sánchez Nieves, Vicarios Parroquiales. También estuvieron presentes, el Sr. Johnny Cruz Flores, Alcalde del Distrito, la Depositaria y el Doliente de este año, así como los miembros de la Hermandad de Caballeros del Santo Sepulcro de Nuestro Señor Jesucristo, y los integrantes de la diferentes Asociaciones, Hermandades y Cofradías de este fervoroso Distrito.

Cabe destacar que Catacaos la católica, Catacaos la piadosa, Catacaos la creyente, vive intensamente la Semana Santa, lo que le ha valido ser declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación, dado que constituye una verdadera reserva espiritual, cristiana y católica no solo de esta zona de Piura sino de toda la región, del norte del país y del Perú entero. Desde hace más que 500 años Piura se convirtió en la puerta de ingreso de la fe al Perú, y por ello damos gracias a Dios por esta fe recibida, que ahora es nuestra responsabilidad cuidar y acrecentar. El más grande de los desafíos que tenemos es el acortar la distancia entre la fe que profesamos y la vida que llevamos. Por ello en Piura y Tumbes, pero muy especialmente en Catacaos vivimos nuestra fe intensamente y la hacemos vida cotidiana.

Durante su homilía, nuestro Pastor dijo: “En este domingo que celebramos la Pascua de Resurrección del Señor, podemos decir que es un domingo por excelencia, porque después cada domingo actualizamos el misterio de la Pascua. Leemos en el Evangelio a María Magdalena, y la vemos que muy temprano va al sepulcro, dice: «cuando todo estaba oscuro» y vio que estaba movida la piedra del sepulcro. Es hermoso tener en cuenta que María Magdalena fue la mujer que vio cuando lo mataban a Jesús, cuando lo sepultaban, y ahora va con prontitud, porque realmente lo amaba, y descubre que habían sacado al Señor del sepulcro. Ella no capta nada todavía, no entiende dónde lo pusieron, no capta la Resurrección y va rápidamente a contarle a Pedro, y al discípulo que Jesús amaba, como todos sabemos que es San Juan, nos dice el Evangelio. Los dos van al sepulcro, Pedro ve que están las vendas a un costado, que no está, no sabe tampoco dónde lo ponen; pero dice que el discípulo que el Señor amaba vio y creyó. Él entró, vio y creyó. Qué maravilla, y esa será nuestra vida; nosotros vemos desde la fe, nosotros sabemos que no necesitamos otro signo, como le pasó a Tomás, que tenemos el don, la gracia de saber que el signo quizás es esa palabra que nos dice la Escritura y esa confianza que el Señor nos había anunciado que iba a resucitar. Esta ha de ser la alegría más honda para un cristiano, nosotros tenemos que renovar nuestra confianza porque Cristo lo ha dicho, porque la muerte ha sido vencida, porque nos ganó una vida nueva”.

En otro momento, nuestro Administrador Apostólico reflexionó: “Entonces en este tiempo pascual, en la Misa vamos a decir siempre estos domingos, por eso con esta efusión del gozo pascual el mundo entero está llamado a la alegría, donde el gozo pascual es muerte y resurrección, el gozo de que la muerte no fue la última palabra; por lo tanto, el dolor, la enfermedad, aún la muerte no es la última palabra, si no es la vida para siempre. Por eso debemos tener alegría, y un cristiano debe vivir con rostro alegre. En algún momento a los de Emaús se les criticó ese semblante triste, nosotros debemos tener alegría porque Jesús resucitó, porque somos de verdad hijos de Dios, porque celebramos en comunidad la fe, porque sabemos que María nos ama, que como estuvo al pie de la cruz también está a nuestro lado”.

Finalmente, Monseñor Guillermo Exhortó: “Vamos a pedirle al Señor que este tiempo que estamos celebrando de la Pascua, lo hagamos con la alegría de ser esos discípulos que corriendo van al encuentro con Jesús y no lo encuentran, pero creen sin haber visto. Así nos dijo Jesús: «Felices los que sin ver creen». Que todo el espíritu de la Pascua sea lo que nos motive a vivir cada año. Que lo que recordamos ayer Sábado Santo con la luz, que sepamos que Cristo nos ilumina; toda situación está iluminada por Jesús y no tenemos que caminar con temor, ni paso vacilante. Feliz Pascua para todos, y que la alegría de este Domingo y de todos los Domingos que actualizamos la Pascua nos acompañe durante todo el año. Que Dios los bendiga a todos. ¡Así sea!”.

Culminada la Santa Misa, un espectáculo de fuegos artificiales iluminaron los cielos, como genuina muestra de la inmensa alegría por la Pascua y todos los presentes acompañaron la procesión del «Señor Resucitado», que recorrió la Plaza Mayor del Distrito, hasta encontrarse con la venerada imagen de la «Virgen María», un hermoso encuentro que marca la tradición de la Semana Santa de Catacaos.