La Biblia sin Fronteras: Evangelización y esperanza en el Penal Río Seco
Durante el mes de septiembre, la Pastoral Carcelaria del Arzobispado de Piura, en coordinación con el administrador apostólico, Monseñor Guillermo Elías Millares, llevó a cabo una significativa iniciativa espiritual en el Penal Río Seco, en el marco de la celebración del Mes de la Biblia.
Con el taller titulado “La Biblia sin Fronteras”, se logró reunir a 100 internos de distintos pabellones —según lo permitido por el INPE— para redescubrir el valor transformador de la Palabra de Dios. Esta actividad fue una oportunidad para anunciar a Jesucristo, la Palabra hecha carne, a quienes viven una experiencia de encierro, pero no están excluidos del amor y la misericordia de Dios.
Cada martes, durante todo el mes, los agentes de la pastoral carcelaria —acompañados por el P. Renzo Bedón, los diáconos Ronald Agapito y Joel Sandoval, y el abogado Gustavo Céspedes— se reunieron con los internos en el salón multiusos del penal. El objetivo fue claro: generar un encuentro personal con Jesucristo vivo y resucitado, que ofrezca sentido, consuelo y transformación interior.
El taller abordó temas fundamentales como: ¿Qué es la Biblia?, su autor primario (Dios) y los autores humanos, las lenguas originales en que fue escrita, la estructura del Antiguo y del Nuevo Testamento, y una pregunta central: ¿Qué puedo encontrar en la Biblia desde mi realidad en la cárcel?
Además, los jueves se realizaba una réplica del contenido en cada pabellón, permitiendo que lo aprendido se profundizara en comunidad y desde la experiencia concreta de cada grupo de internos. Esta metodología buscó no solo transmitir conocimientos, sino también fomentar la reflexión personal y la vida fraterna entre los participantes.
El martes 30 de septiembre, Monseñor Guillermo Elías presidió la Misa de clausura del Mes de la Biblia, acompañado por el nuevo director del INPE, abogado Martín Gómez, y numerosos internos que participaron activamente en el proceso formativo.
Esta experiencia deja un mensaje claro: la Iglesia no abandona a sus hijos, incluso en los lugares más difíciles. La presencia pastoral en las cárceles es un testimonio concreto de una Iglesia que, como dice el Papa Francisco, “no se queda en el templo, sino que sale al encuentro de quienes más lo necesitan”.
En esta acción pastoral, también fue escenario
Esta jornada fue también una valiosa oportunidad para avanzar en la revisión y mejora del taller de cerámica del establecimiento penitenciario. En esta ocasión, se contó con la presencia del Ing. Leonardo Fernández, quien, junto a las autoridades del INPE y en compañía de nuestro Administrador Apostólico, Monseñor Guillermo Elías Millares, realizó una visita técnica al espacio de trabajo.
Durante el recorrido, se llevó a cabo la evaluación y medición de las instalaciones, en el marco de la propuesta de la Arquidiócesis de Piura de seguir apoyando y fortaleciendo los ambientes destinados a la formación técnica y reinserción laboral de los internos.
La mejora planteada contempla la implementación de un nuevo piso en el taller, lo que permitirá optimizar las condiciones en las que los internos desarrollan sus actividades de cerámica y manufactura artesanal. Este tipo de iniciativas reflejan el compromiso de la Iglesia con una pastoral integral, que no solo anuncia el Evangelio, sino que también promueve la dignidad, el trabajo y la esperanza en contextos de privación de libertad.
La Pastoral Carcelaria del Arzobispado de Piura reafirma así su compromiso de humanizar, evangelizar y acompañar a quienes, privados de su libertad, buscan redención y esperanza en medio del dolor. La misión continúa también en los penales de Sullana ( de mujeres) recordando siempre que el Evangelio también se escribe en las cárceles, allí donde la luz de Cristo no deja de brillar.