“UNA NOCHE PARA BRILLAR”
Celebrando la vida con nuestros hermanos con capacidades especiales
16 de febrero de 2023 (Oficina de Prensa).- Por sexto año consecutivo, más de un centenar de jóvenes y adultos con capacidades especiales fueron los invitados de honor en la inolvidable experiencia de una noche de fiesta, centrada en el amor de Dios, durante la gran gala del proyecto “Una Noche para Brillar”, programa de la “Fundación Internacional Tim Tebow” que se desarrolla en 34 países del mundo. La fundación patrocina las actividades que se realizan en las localidades elegidas en beneficio de nuestros hermanos con capacidades especiales, para brindar Fe, Esperanza y Amor a quienes necesitan un día más brillante, en su hora más oscura de necesidad. Cabe destacar que “Una Noche para Brillar” sólo se realizaba en los Estados Unidos, Piura – Perú fue la primera ciudad y país fuera del territorio norteamericano donde se ha llevado a cabo esta actividad.
6 años haciendo felices a nuestros hermanos con capacidades especiales
Esta nueva edición de “Una Noche para Brillar” se desarrolló en el Coliseo de la Parroquia Santísimo Sacramento de nuestra ciudad, gracias a las coordinaciones del R.P. José Guillermo Uhen, párroco del lugar, y a la feliz iniciativa de nuestro Arzobispo Metropolitano, Monseñor José Antonio Eguren Anselmi, S.C.V. Son cerca de 200 voluntarios que han trabajado arduamente en la organización del evento, el cual se inició semanas atrás cuando llevaron la invitación personal al hogar de cada uno de los inscritos. Los mismos voluntarios, que son los anfitriones de la noche, recogieron a cada invitado de honor junto y un familiar para llevarlos a la fiesta. Ellos ingresaron por una gran alfombra roja en medio de los aplausos de los presentes para disfrutar de una noche de buena música en una amplia pista de baile especialmente decorada, y celebrar con sándwiches, bocaditos y sesiones de fotos. Asimismo, participaron de una ceremonia de coronación, donde cada uno recibió una corona junto con hermosos regalos para llevar a casa. La velada se inició y se cerró con emotivos momentos de oración.
Toda vida es valiosa en sí misma
Monseñor Eguren se hizo presente en esta actividad y dirigió unas emotivas palabras a los padres y familiares de los presentes: “Me alegra mucho poder estar aquí nuevamente con ustedes. La experiencia que sus hijos han vivido al entrar a la parroquia por esa alfombra roja, busca expresar que ellos son importantes y que significan mucho para todos y cada uno de nosotros, en especial para ustedes que son sus padres. Miren sino cuánta alegría, espontaneidad, esperanza, ganas de vivir, entusiasmo y amor nos transmiten ellos esta noche. Nunca olvidemos que toda vida es valiosa en sí misma, desde la concepción hasta su fin natural. Toda vida es un reflejo del amor de Dios. No dejemos de celebrar la belleza de tener a sus hijos entre nosotros, amémoslos siempre. Quiero agradecerles el valiente testimonio y el maravilloso ejemplo que dan en favor de la vida. Estos hermanos nuestros que tienen capacidades diferentes son muy valiosos, especiales e importantes en nuestras vidas. Ellos nos recuerdan que todo ser humano tiene una dignidad inalienable y una misión en la vida, y que no son meros objetos pasivos de nuestra caridad”.
Un ambiente maravilloso
Pudimos conversar con los esposos Alejandro Peña y Faire Medina, quienes han sido parte de las decenas de “padrinos” que tuvieron a su cargo el preparar y llevar a sus “ahijados” a la celebración: “Esta es la primera vez que participamos en este evento, preparado para personas con capacidades diferentes, niños, jóvenes y adultos. Nos animamos porque vimos que era una buena oportunidad, de hacer una obra de caridad y dedicar nuestro tiempo al Señor, sirviéndole de corazón. Tras inscribirnos y recibir las tarjetas de invitación, fuimos a entregarlas al lugar indicado. Desde que llegamos al domicilio donde vivían nuestros invitados, fuimos muy bien recibidos por sus familiares, nos expresaron su alegría de recibir dichas tarjetas para participar una vez más en el evento que nos comentaban era maravilloso. El día de la actividad junto con mi esposa, fuimos a recoger a nuestros ahijados Ángel y Joel y también a sus mamás, llegamos a la iglesia y nos gustó encantó la organización de recibimiento y acogida desde la entrada hasta llegar a la mesa donde nos ubicamos. Mi esposa y yo nos sentíamos muy bien por el ambiente que se vivía y lo expresaban todos los participantes, especialmente los niños y niñas con habilidad diferentes, muy espontáneos expresaban su alegría de estar en la fiesta. Solo se podía respirar felicidad y cada uno de ellos expresaba su gozo con total sinceridad. Nunca había visto un ambiente tan acogedor. Felicito de verdad a la Parroquia, a todos los organizadores y los participantes por esas muestras de cariño, de amistad, de alegría y sobre todo por su gran sentido humano, que contagiaba a todos y cada uno de los asistentes. Principalmente muchas gracias al Padre José Guillermo y a todo su equipo de colaboradores por dedicarse de corazón a cada detalle, para llevar alegría y gozo a cada persona que asistió a dicha actividad. Estamos decididos a continuar participando de ahora en adelante en todas las celebraciones que se organicen para este fin”.
Cuando las cosas se toman con ímpetu y con fe en Dios se llega a grandes logros
Asimismo, Luz María Villaseca Guevara, voluntaria de la actividad nos comenta: “Esta experiencia, por primera vez vivida, ha sido muy hermosa, maravillosa. He sido yo quien se ha llevado un grandioso aprendizaje. En un inicio no iba a poder aceptar este reto por circunstancias personales, pero decidí asumirlo y sin duda es grande la experiencia que me ha dejado para la vida. Mi ahijado, Kevin, es un joven de 20 años que sufrió de parálisis, tuvo la mitad del cuerpo paralizado y su madre ha tenido una lucha constante para que su hijo salga de la situación y se mejore. Hoy en día Kevin nos da una gran experiencia de vida. Con su actitud nos muestra un reflejo de optimismo, un ejemplo de que cuando las cosas se toman con ímpetu y con fe en Dios se llega a grandes logros. Kevin es actualmente campeón de natación y nos irá a representar a Alemania, irá con un acompañante, probablemente sea su mamá o su hermana, y desde ya estamos haciendo todo lo posible para reunir los fondos necesarios para cubrir sus gastos. Le agradezco muchísimo a Dios, a la Parroquia Santísimo Sacramento, a Kevin y su familia por esta maravillosa experiencia que llevaré siempre en mi alma”.
Felices por tan hermosa experiencia
Clara Guayanay Saavedra, mamá de Kevin Cristopher Juárez Guayanay, uno de los homenajeados esta noche, nos cuenta su experiencia: “Esta última noche para brillar, ha sido una de las más bonitas. Primero por la confraternidad entre todas las personas asistentes, aun sin conocernos pudimos sentirnos a gusto y emocionados ya que nuestros hijos disfrutaban del momento, se sintieron muy a gusto con todo lo organizado para ellos, desde el recibimiento en el ingreso, el obsequio que le pudieron dar lo emociono más aun a Kevin, realmente pensaron en todo. El baile y la buena música es lo que más le gusta a mi hijo y pudo disfrutar de cada pieza de baile con la voluntaria Luz María, gracias por todo lo organizado para ellos. Realmente lo hicieron sentir como un rey. Estamos muy felices por tan hermosa experiencia”.
La alegría que los niños desbordan es indescriptible
Finalmente, Rosa Merino, encargada de los voluntarios de esta actividad, nos cuenta: “Estoy al frente, por tercer año consecutivo, de este servicio en beneficio de los niños con capacidades diferentes. Tras estos años duros de pandemia, en los que hubo que hacer una edición virtual de esta actividad, el camino se tornaba arduo porque el compromiso que los voluntarios debían asumir ya no solo era llevar invitaciones y un presente, sino que el día del evento debían llegar a las casas de sus invitados para recogerlos, acompañarlos durante la fiesta y regresarlos a su domicilio. El compromiso ya no era tan sencillo para algunos por sus trabajos o estudios y temíamos que los niños se quedaran sin voluntarios, no sería lo mismo, queríamos que sean los reyes de la noche y debían ser atendidos como tal. Por ello ampliamos las convocatorias para que todos tengan su voluntario y puedan disfrutar de la fiesta, de esta manera se nos unieron más jóvenes e incluso matrimonios. Cabe mencionar que cada año la cifra de los invitados va en aumento. Gracias a Dios pudimos contar con todos los voluntarios necesarios que acompañaron a sus invitados en su noche para brillar. Se logró el objetivo. La experiencia es enriquecedora y la alegría que desbordan nuestros hermanos con capacidades diferentes, llena el alma, es indescriptible. El esfuerzo siempre vale la pena cuando nuestro Señor nos muestra el amor verdadero en almas puras como las de ellos”.