SANTA TERESA DE JESÚS JORNET E IBARS: “CUIDAR LOS CUERPOS PARA SALVAR LAS ALMAS”

Arzobispo celebra Santa Misa con abuelitos del Asilo de Ancianos en Piura

29 de agosto de 2023 (Oficina de Prensa).- Con ocasión de celebrarse la festividad de Santa Teresa de Jesús Jornet e Ibars, fundadora de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, fiesta que coincide en nuestro país con la celebración del Día del Adulto Mayor, nuestro Arzobispo Metropolitano, Monseñor José Antonio Eguren Anselmi S.C.V., visitó el Asilo de Ancianos de Piura, donde sostuvo un emotivo encuentro con las religiosas y los abuelitos que ahí residen.

Monseñor Eguren celebró la Santa Misa, junto a los ancianitos, festejando la vida de estos hermanos nuestros que se encuentran acogidos, en un ambiente de familia, y son cuidados amorosamente por las religiosas en este Asilo, atendiéndolos en todas sus necesidades: materiales, espirituales y de afecto. Concelebraron la Eucaristía, el R.P. Neiber Cabrera Quispe Camilo, Religioso de la Orden de San Camilo, el R.P. Junior Jordan Chávez Roa, Vicario Parroquial de la Basílica Catedral de Piura, el R.P. Wuillam Alberto Carajulca Enciso O.F.M., el R.P. Rafael Tito Zárate O.F.M., y el R.P. Juan Carlos Guerrero Guerrero O.F.M., sacerdotes franciscanos que atienden espiritualmente a los más de 100 ancianitos que actualmente residen en el Asilo. Participaron también, Sor Irma Calderón Pérez, Superiora de la comunidad de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados en Piura, el Ing. Víctor Palacios, Presidente del Comité de Apoyo al Asilo, los voluntarios que prestan su servicio en el lugar, religiosas de varias congregaciones, así como los bienhechores y benefactores de esta hermosa obra de Dios, junto a una gran cantidad de fieles cristianos.

Gracias por cuidar a los ancianitos desamparados

Al iniciar su homilía, nuestro Pastor manifestó su profundo agradecimiento a las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, por el abnegado trabajo, entrega generosa y servicial para con los abuelitos que viven el Asilo, muchos de ellos abandonados por sus familias o padeciendo complicadas enfermedades: “Con mucha alegría vengo a celebrar esta Eucaristía en este Asilo de Ancianos que con mucho amor ustedes, queridas Hermanitas, dirigen desde hace 72 años en nuestra querida Piura. Quiero agradecerles por todo el bien que han realizado y que realizan en favor de nuestros ancianos. Con su apostolado, sirviéndoles con amor y paciencia, demuestran que la persona vale por sí sola, por ser creada a imagen y semejanza de Dios, y que cada vida tiene un valor infinito e incalculable desde su concepción hasta su fin natural”.

Sean dóciles instrumentos del amor de Dios

“Queridas hijas -continuó Monseñor Eguren- que la fiesta de hoy las renueve en su vocación y misión y las llene de alegría y amor en su servicio a nuestros ancianos. Como lo decía vuestra fundadora: «que los ancianos estén contentos y que no les falte nada de lo necesario, pues ésta es una de nuestras principales obligaciones, y por lo mismo se debe poner la mayor vigilancia y sumo cuidado para que estén bien asistidos». Sean como ella, dóciles instrumentos del amor de Dios para que así sirvan a Cristo en el prójimo y manifiesten a todos que el amor es real, que salva y que es lo único que llena la vida de sentido y gozo. Nunca olviden que como todo se hace por Dios, el Señor les ayudará en todas las cosas, por ello, en el servicio amoroso a los ancianos y en la fiel observancia de sus Constituciones está vuestra santificación. Sigan siempre la consigna de vuestra fundadora: «Cuidar los cuerpos para salvar las almas». Tengan siempre presente que el que contribuye a salvar las almas de sus prójimos, salva la suya”.

Ver a Cristo en cada ancianito

Antes de finalizar su homilía nuestro Arzobispo exhortó a los fieles presentes, especialmente a las religiosas, y les dijo: “Debemos estar siempre pendientes de nuestros mayores. Cuidarlos significa atenderlos, amarlos y protegerlos, Ustedes viven cada día la verdadera caridad cristiana, aquella que no es simple filantropía, sino que es por un lado mirar a sus ancianitos con los mismos ojos de Jesús, y por el otro, ver al Señor Jesús en la persona de cada uno de sus ancianitos. Ellos se merecen todo nuestro amor agradecido. Valoremos el don de una vida larga que significa presencia de sabiduría y experiencia en nuestras vidas. Que, siguiendo el ejemplo de Santa Teresa de Jesús Jornet e Ibars, siempre sean ustedes capaces de ver en los ancianos una mística prolongación de Cristo, para atenuar en ellos sus fatigas, sus enfermedades y sufrimientos. Porque, como el Papa Francisco nos reitera una y otra vez, los niños y los ancianos construyen el futuro de los pueblos, y un pueblo que no cuida a sus ancianos y que no se preocupa de sus jóvenes, es un pueblo sin futuro, un pueblo sin esperanza”.

La Fundadora

Santa Teresa de Jesús Jornet fundó la Congregación de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados en el año 1872 junto con el sacerdote Saturnino López Novoa. Un año después, en 1873 abrió su primer asilo para ancianos en la ciudad de Valencia. Fue canonizada el 27 de enero de 1974 por San Pablo VI que también la proclamó patrona de la ancianidad en España en 1977. En la actualidad, la congregación cuenta con más de 2.200 religiosas Hermanitas de los Ancianos Desamparados atienden a más de 20 mil ancianos sin recursos en 204 asilos y residencias en 21 países en Europa, Iberoamérica, África y Asia.