Palio arzobispal signo de comunión con el Papa
28 de junio (Oficina de Prensa).- El día de mañana, 29 de Junio, el Santo Padre Benedicto XVI impondrá el “Palio” a nuestro Arzobispo Metropolitano de Piura, Monseñor José Antonio Eguren Anselmi, S.C.V.
Su Santidad Benedicto XIV, fijándose en la lana de ovejas en que está confeccionado, lo señaló como imagen de la oveja perdida que el Buen Pastor buscó y encontró para devolver al redil. La expresiva ceremonia de confección del palio y sobre todo de su permanencia durante un tiempo junto al sepulcro de San Pedro, más su bendición, hablan clarísimamente de él como de expresión del poder pastoral trasmitido, y como exigencia y signo de fidelidad y unidad con la Sede de Pedro..
A continuación les ofrecemos el significado espiritual que el “Palio” posee.
¿Qué es el “palio”?
El palio es una prenda eclesiástica que consiste en una faja de lana blanca, de entre cuatro y seis centímetros de ancho, confeccionada en forma de collar con dos extremidades, una por el pecho y otra por la espalda, que lleva bordada seis cruces de seda negra, cuatro en el collar y otras dos en las extremidades.
¿Quien confecciona el palio?
La confección de los palios está reservada a las monjas benedictinas del Monasterio Romano de Santa Cecilia. Lo hacen con la lana de dos corderos blancos que se bendicen todos los años, el 21 de enero en la Iglesia de Santa Inés, después de la celebración de la Misa, y luego son bendecidos otra vez en el Vaticano antes de ser entregados a las religiosas para que los cuiden y confeccionen dichas prendas. Después se guardan sobre la urna donde están las reliquias del cuerpo del Apóstol San Pedro, hasta el día 29 de Junio, en que se impondrán a los nuevos arzobispos.
¿Cuál es su significado?
Jurídicamente el palio arzobispal es el símbolo de la potestad que tienen los arzobispos en su provincia eclesiástica y los lazos de comunión con el Romano Pontífice. De ahí toda esa ceremonia que se hace en la confección del palio depositándolo sobre las reliquias del primer Papa. La Provincia eclesiástica de la Arquidiócesis de Piura está conformada por las Diócesis de Chachapoyas, Chiclayo, Chota, y Chulucanas.
¿Cuál es su origen?
Parece ser que este símbolo está tomado de la preciosa faja que los nobles romanos que se ponían al cuello en las grandes solemnidades y que la Iglesia la adoptaría como insignia de jurisdicción eclesiástica. Al principio era un signo exclusivo de los Papas, aunque más tarde lo concedieron a los obispos que habían recibido de Roma una especial jurisdicción. El primer Papa que lo concedió fue Simmaco, en el año 513, y lo impuso a Cesario, obispo de Arlés (Francia). Desde el Concilio Constantinopolitano IV (siglo VII), se le concedería de manera especial a los arzobispos.
¿Cuándo puede ser utilizado?
El Arzobispo Metropolitano puede usarlo en todas las Iglesias de su Provincia eclesiástica.