“CRISTO SALE A BUSCARTE CON AMOR Y TERNURA PARA QUE TRABAJES EN SU VIÑA”
Santa Misa con la Hermandad Infantil del Señor de los Milagros de Piura

Asimismo fue ocasión para que ese mismo día 40 nuevos hermanos adultos juramentaran en la Hermandad y recibieran su hábito morado asumiendo el compromiso de llevar una vida cristiana coherente, junto a 6 nuevas hermanas sahumadoras.
Durante su homilía Monseñor Eguren reflexionó sobres las enseñanzas del Evangelio del día (Mt 20,1-16) para nuestra vida cristiana: “Queridos hermanos, en el Evangelio de hoy vemos reflejado a nuestro Señor Jesús en la persona del dueño de la viña. Es Dios quien tiene la iniciativa y sale a buscarte para que participes de su amor, porque Él sabe que sin Él no somos nada. La ternura y la misericordia de Dios es inmensa e infinita, por ello Él quiere que todos trabajemos en su viña que es la Iglesia Católica. Hoy, Él te ha buscado a ti y a mí para estar presentes en esta Misa, y nosotros hemos respondido con un Sí como el de nuestra Madre, la Santísima Virgen María”.
“Todos los cristianos – agregó nuestro Pastor – necesitamos ser conscientes de que sin Cristo la vida es triste y oscura. Pero preguntémonos: ¿Nos dejamos encontrar por Cristo que sale a nuestro encuentro cada día? Cuándo escuchamos su voz ¿nos vamos tras Él? No tengamos miedo de encontrar a Cristo y responder a su invitación y seguirlo de cerca. En Él está la felicidad que anhelamos”.
“Queridos niños de la Hermandad Infantil del Señor de los Milagros, hermanos y sahumadoras: Hoy estamos frente a una de las más hermosas expresiones que nos ha regalado Dios, el Señor de los Milagros, y a través de esta imagen Dios no sólo nos entrega a su Hijo con infinito amor, sino que también nos ofrece el perdón por nuestros pecados. Así es Dios de bueno y misericordiosos, que sale al encuentro de todos sus hijos y busca incluso hasta el más pecador de los hombres para que trabaje junto a Él en su viña. Porque Dios ama a todos y quiere que todos sus hijos se salven. Amen cada vez más y sean siempre fieles al Señor de los Milagros”.
Finalmente Monseñor Eguren exhortó a los fieles presentes a que como trabajadores en la viña del Señor cada cual sea generosos en su respuesta a Él y no tengamos envidia de los hermanos: “Aprendamos del Señor Jesús a ser generosos en nuestra entrega, aprendamos la humildad del Señor de los Milagros que no se reservó nada para sí, sino que entregó su vida y derramó su sangre para salvarnos a todos, justos y pecadores. Y en segundo lugar no seamos envidiosos, reconozcamos que Dios es bueno con todos y a todos nos da los dones necesarios para trabajar en su viña y así alcanzar el salario prometido, la vida eterna. Por ello no caigamos en la envidia, pecado que consiste en alegrarme del mal ajeno o entristecerme por su bien. Más bien, lo cristiano es que el dolor y el sufrimiento de tu hermano sean también tuyos y en la alegría de tu hermano, tú también estés alegre. La envidia es un mal regional y nacional, no caigamos en ella. Bendigamos a Dios y démosle gracias por los dones que cada uno ha recibido de Él y trabajemos incansablemente y con generosidad en su viña”.
